"Mi esposo y yo hemos recorrido un largo y difícil camino intentando tener un bebé. Llevamos a cabo distintos tratamientos para atender el diagnóstico oportuno que el Doctor Arturo nos brindó.
Muchas veces pasamos por cansancio, desilusión, dolor, tristeza; pero nunca nos rendimos y siempre confiamos en la labor que realizaba.
Gracias al trabajo del equipo de Ventris hoy podemos decir que estamos muy emocionados esperando un bebé.
A quienes quieren ser madres, a todas las parejas que pasan por enfermedades o situaciones que la naturaleza misma les impuso, no desistan. Sigan intentando, confíen en el proceso, tengan paciencia y mucha fe, todo llega a su tiempo, lo que parecía imposible para nosotros hoy es una realidad y espero que así sea para todos los que soñamos tener una familia".
" Llegamos a Ventris en el 2017, con ilusión, miedo, pero con mucha fe. Después de algunos intentos, logramos el anhelado positivo en agosto de 2019. Ahora nuestra niña está a punto de cumplir 4 años, estaremos sumamente agradecidos toda la vida con el Doctor Arturo y todo el equipo".
"Ventris fue para nosotros una esperanza para después de 10 años convertir nuestro sueño realidad, después de tanto tiempo por fin nuestra familia será de 4.
Gracias por hacer que este proceso no fuera difícil, al contrario, siempre caminamos con la fe puesta en Dios, sabemos que él fue quien nos mandó a las personas indicadas".
"Así fue nuestro camino con Ventris:
En el año 2022, más o menos por el mes de julio, después de 7 años de matrimonio en los cuales no pudimos lograr un embarazo, mi esposo y yo tomamos la decisión de buscar un especialista en fertilidad para ver si todo estaba bien; así encontramos al Doctor Arturo Morales, quien después de varios estudios nos comentó que todo se miraba bien con los dos, que solo en mí la hormona tiro estimulante estaba un baja, que a él le gustaría que estuviera más alta y me recetó un medicamento, el cual no dejaría hasta lograr el embarazo, también nos comentó que había varios métodos para lograr el embarazo y nos fuimos por el coito programado por dos meses (agosto y septiembre), pero no lo logramos.
Después de ese método, estaba la inseminación artificial y la FIV, pero mi esposo y yo decidimos esperar hasta entrando el año 2023. En esos meses de espera, le comenté a mi esposo que prefería saltar la inseminación artificial e irnos a la FIV, donde había un porcentaje más alto de éxito, porque para quienes hemos tenido o tienen problemas para embarazarse sabemos de lo difícil que es este proceso y lo angustiante que es la espera y yo no quería eso.
Entró el año, y en el mes de febrero pusimos nuestra cita para retomar el tratamiento. Le comentamos al doctor nuestra decisión y nos dio toda la información necesaria. Me hice nuevamente estudios, pues ya habían pasado meses de los anteriores. Mi hormona tiro estimulante estaba mejor, pero el doctor me volvió a comentar que no dejara el medicamento, aunque mi hormona estuviera mejor. Ya estaba todo listo para comenzar la FIV, que se programó para el mes de abril. Solo esperaba mi regla del mes de marzo para comenzar el medicamento que ya habíamos comprado.
Como soy irregular en mi periodo, también tenía medicamento en caso de no reglar ese mes, pues no reglé, pero para mí era normal, entonces tomé el medicamento para reglar que se suponía hacía efecto de 3 a 5 días y no funcionó. Me comuniqué con el doctor para informarle que aún no tenía mi regla y para preguntar si tomaba algo más, me dijo que no, que tenía que ir para checarme y ver que estaba pasando. El 17 de marzo fui, y me dice que mi endometrio está engrosado, yo no sabía qué significaba eso, me dijo: “¿Te has hecho una prueba de embarazo?” y le dije “sí, la semana pasada”, pero salió negativa. Él me da una prueba ahí en el consultorio, pero yo no pude orinar y me dijo: “Llévatela, cuando puedas te la haces”.
Después de ahí fuimos a comer, y me hice la prueba, se miraba una segunda rayita tan suave que era muy dudosa, me comuniqué con Ventris y me dicen: “Probablemente estás embarazada, el doctor quiere que regreses en una semana”. Obviamente, yo no podía esperar una semana, y creo que todos los días me estuve haciendo pruebas y todas positivas, hasta que llegó el día del esperado eco y recibimos la esperada noticia. Estaba embarazada, después de 7 años intentando y a semanas de un in vitro, hoy, gracias a Dios y al Doctor Arturo Morales porque sin su diagnóstico de mi hormona tiro estimulante baja, quizá nunca me hubiera podido embarazar y hoy no tuviéramos en casa a nuestra hermosa princesa".
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